
Cómo mantener hidratado a tu bebé: Guía completa para padres
Mantener a tu bebé adecuadamente hidratado es esencial para su salud y bienestar, especialmente en climas cálidos o durante episodios de enfermedad.
En este artículo, te ofrecemos una guía completa sobre cómo asegurar que tu pequeño reciba la cantidad adecuada de líquidos, cómo reconocer los síntomas de deshidratación y qué hacer para prevenirla.
Importancia de la hidratación en bebés
La hidratación es crucial para el correcto funcionamiento del cuerpo de tu bebé. Los líquidos ayudan a regular la temperatura corporal, mantener el volumen sanguíneo estable, favorecer la digestión y lubricar las articulaciones.
Es especialmente importante durante la temporada de calor, al visitar sitios soleados o si vives en un lugar con temperatura elevada.
Cómo iniciar la hidratación en la alimentación complementaria
Cuando tu bebé comience la alimentación complementaria, alrededor de los seis meses, puedes empezar a ofrecerle pequeñas cantidades de líquidos adicionales a la leche materna:
- Comienza con 30-60 ml de agua al día y aumenta progresivamente.
- Un bebé de 6 a 12 meses necesita entre 700 y 800 ml de líquidos diarios, de los cuales el 60-70% debe provenir de la leche materna y el 30-40% de otros líquidos y alimentos.
Identificación de los síntomas de deshidratación en bebés
La deshidratación ocurre cuando el bebé pierde más líquidos de los que recibe. Es esencial reconocer los síntomas tempranos para actuar a tiempo:
- Labios y boca seca
- Llanto sin lágrimas
- Orina de color amarillo oscuro y con olor intenso
- Pasar más de cinco horas sin mojar el pañal
- Cansancio y falta de energía
Señales de deshidratación severa:
- Ojos hundidos
- Cansancio extremo
- Nerviosismo o inquietud
- Manos y pies fríos
Si observas estos síntomas, acude de inmediato a un profesional de la salud.
Consejos para prevenir la deshidratación
Para prevenir la deshidratación en tu bebé, sigue estos consejos prácticos:
- Ofrecer líquidos frecuentemente: Durante y después de actividades físicas, y a lo largo del día en climas cálidos.
- Evitar la exposición prolongada al sol: Usa bloqueador solar adecuado y ofrece bebidas regularmente.
- Variedad de líquidos: Agua simple, agua de frutas sin azúcar añadida, bebidas hidratantes para bebés, y mantener las tomas de leche materna.
- Elegir agua adecuada: Utiliza agua con bajo contenido de sales para evitar la sobrecarga de minerales.
Beneficios de mantener una buena hidratación
Mantener a tu bebé bien hidratado tiene múltiples beneficios:
- Mejor digestión: Ayuda a prevenir el estreñimiento.
- Regulación de la temperatura corporal
- Volumen sanguíneo estable
- Lubricación de las articulaciones
La hidratación es una parte fundamental del cuidado de tu bebé. Asegúrate de ofrecerle suficientes líquidos y estar atento a los síntomas de deshidratación.
Para obtener más consejos personalizados y recursos útiles, te invitamos a registrarte en FamilyNes.
Al unirte, recibirás material exclusivo y adaptado a las necesidades de tu familia, asegurando el bienestar de tu pequeño en cada etapa de su desarrollo.