¿El padre debe estar en la sala de partos?

Los ejercicios para embarazadas más recomendados son aquellos de bajo impacto, como caminar, nadar, practicar yoga prenatal o hacer pilates adaptado, ya que ayudan a mejorar la circulación, aliviar dolores musculares y fortalecer el cuerpo para el momento del parto. Es importante escuchar al cuerpo, mantenerse hidratada y evitar movimientos bruscos o ejercicios de alto riesgo.

Aunque la mayoría de los alimentos son seguros, algunos pueden causar molestias en el bebé, como cólicos o gases (por ejemplo, coles, brócoli, ajo o comidas muy condimentadas). También deben evitarse el alcohol, el exceso de cafeína y ciertos pescados con alto contenido de mercurio.

Durante el embarazo los senos suelen aumentar de tamaño, ponerse más sensibles y las areolas pueden oscurecerse. También es normal que aparezcan pequeñas venas visibles y, más adelante, que se produzca calostro (líquido amarillento previo a la leche).

El embarazo suele empezar a notarse físicamente entre las semanas 12 y 16, cuando el útero comienza a crecer y puede notarse un pequeño aumento en el abdomen. Esto varía según cada mujer y su contextura física.

Durante el embarazo es común tener un flujo más abundante, de color blanco o transparente. Revisa qué es normal y cuándo consultar en esta guía sobre flujo de embarazo. Si el flujo presenta un color marrón, rosado, verdoso o con mal olor, es importante consultar al médico.

Las principales vitaminas para embarazadas incluyen el ácido fólico, que ayuda a prevenir defectos en el tubo neural; el hierro, que evita la anemia y apoya el crecimiento del bebé; el calcio, esencial para huesos y dientes fuertes; y la vitamina D, que favorece la absorción del calcio. También son importantes el yodo y la vitamina B12, especialmente si llevas una dieta vegetariana.

Las náuseas matutinas son comunes durante el primer trimestre del embarazo. Pueden aliviarse comiendo pequeñas porciones de comida a lo largo del día, evitando estómagos vacíos y optando por alimentos suaves como galletas saladas, arroz, plátano o pan tostado. También es útil evitar olores fuertes y comidas muy grasosas o condimentadas. Revisa estos consejos para manejar las náuseas en el embarazo.

Entre los principales alimentos que no puedo comer embarazada están los pescados con alto contenido de mercurio (como el pez espada o el atún rojo), carnes y huevos crudos o poco cocidos, quesos no pasteurizados, embutidos sin calentar y alimentos con riesgo de contaminación como el sushi o los brotes crudos. También es recomendable reducir el consumo de cafeína y evitar completamente el alcohol.

La acidez puede aliviarse evitando comidas muy grasosas, picantes o ácidas, comiendo en porciones pequeñas varias veces al día y no acostándose inmediatamente después de comer. Dormir con la cabecera ligeramente elevada también puede ayudar; revisa esta guía para evitar el reflujo en el embarazo.

En los primeros días, algunas mujeres pueden experimentar síntomas como cansancio, sensibilidad en los senos, cambios de humor, náuseas leves o un ligero sangrado de implantación. Sin embargo, la forma más confiable de confirmarlo es mediante una prueba de embarazo.

Nestlé® G-Balance® es un suplemento alimenticio que contiene Myo-Inositol y Probioticos (B. Lactis y L. Rhamnosus). La mamá deberá consumir 2 sobres al día.

No es hereditario, pero se ha relacionado con una mayor predisposición de padecerlo en las hijas de madres que tuvieron SOP o diabetes gestacional durante el embarazo. 

¡No! La imagen en el ultrasonido de los ovarios, lleva el nombre de morfología poliquística, sin embargo, no son quistes, son folículos atrapados que no lograron ovular, por lo tanto no son quirúrgicos